Tabaquismo y oxigenoterapia: ¡lo que debes saber!
Cuando su médico le ha recetado una oxigenoterapia, sin duda le habrá dicho que fumar durante la oxigenoterapia no es una buena idea. Pero, ¿por qué exactamente es extremadamente peligroso fumar cerca de oxígeno suplementario?
En primer lugar, el aire que respiramos normalmente contiene aproximadamente un 21% de oxígeno. Sin embargo, los concentradores de oxígeno producen oxígeno concentrado entre 96% y 100%. Aunque el oxígeno en sí no es inflamable, su alta concentración crea un ambiente en el que el fuego se enciende rápida y fácilmente. Incluso una pequeña chispa podría ser suficiente para encender el fuego cuando se utiliza oxígeno, lo que hace que fumar cerca de oxígeno suplementario sea fundamental.
Una vez desconectado el oxígeno adicional, esto no significa que ya no haya peligro. El nivel de oxígeno en el cabello, la piel y la ropa del usuario de oxígeno sigue siendo bastante alto. Por eso, también después de la oxigenoterapia se debe tener mucho cuidado al fumar, ya que existe un mayor riesgo de, por ejemplo, quemaduras en la cara.
Además de ser extremadamente peligroso fumar cerca de oxígeno suplementario, también es probable que empeore la afección médica que necesita oxígeno. La EPOC hace que cada vez se dañen más alvéolos, lo mismo que ocurre con el tabaco. Los alvéolos del cuerpo son extremadamente importantes: llevan oxígeno al torrente sanguíneo para transportarlo a los tejidos y eliminar el dióxido de carbono del torrente sanguíneo.
Al informarse sobre los posibles peligros de combinar fumar con oxigenoterapia, puede ayudar a reducir los accidentes causados al hacerlo. ¡La manipulación segura del oxígeno suplementario es de vital importancia!
